Berlín. Quién te ha visto.....

Hace ya más de 20 años pasé por Berlin y fuí seducida, antes de quedar atrapada, por esta ciudad de la cual su alcalde más mediático dijo una vez que era „pobre, pero sexy“.

 

De aquellos días de paseos por Berlín guardo algunas fotos y unos pocos recuerdos. Uno de los más vívidos es precisamente el del Tacheles, aquel cutre y colorido espacio en el centro de la ciudad.

 

Poco después del flechazo me las arreglé para trasladarme aquí con la idea de quedarme unos meses. Venir a Berlín entonces no era lo mismo que hacerlo ahora. Aunque es cierto que de todo hay en todas las épocas, por aquel entonces Berlín todavía hacía honor a aquella canción alemana que decía:

 

tu estas loco hijo mio,

irás a Berlín,

donde están los locos

alli está tu lugar

 

si consideramos que la locura es lo particular, lo inadaptado, aquello que se desvía de la norma, se podría decir que por aquel entonces y durante algún tiempo mucha gente venía a Berlín buscando diluirse en la masa…. sin tener que renunciar a su parte de locura. Sentirse aceptado sin tener que acoplarse, vivir su lado más loco, más reprimido... para esto Berlín era el lugar.

 

Hoy más que nunca la fisionomía de la ciudad hace honor a aquella vieja canción; las calles y el metro de Berlín están más llenos de desadaptados, mendigos y locos que nunca pero la gente que viene hoy a Berlín, viene simplemente en busca de trabajo.

 

Berlín es hoy la ciudad de las start ups.

 

Sigue siendo pobre, pero ya no es sexy y Tacheles, que fue una vez un espacio cultural, con un cine, un bar y hasta una librería de segunda mano, se ha convertido en un lugar rico pero aburrido.

 

Y aséptico.

 

Y este parece ser la derrota de todas las ciudades modernas; en el momento en que, primero tímidamente  y poco después con absoluta falta de pudor, deciden vender su alma al mejor postor, su destino queda sellado y es este.

 

Todos lo sabemos. Pero seguimos aferrados al progreso.


Escribir comentario

Comentarios: 0